Para comprender el concepto es necesario entender las dos fases en una contracción dinámica. La primera (concéntrica o positiva) es la que se produce en contra de la gravedad, la segunda (excéntrica o negativa) es donde el músculo se estira mientras intenta contraerse. Un ejemplo podría ser en un curl de bíceps: levantar la carga (concéntrico) y descender dicha carga (excéntrico), siempre buscando la contracción muscular.
Es utilizado para la prevención y tratamiento de lesiones.
Juega un papel importante en el tratamiento de las tendinopatías.
Reporta mejoras significativas en las distintas manifestaciones de la fuerza, aunque puede suponer pérdidas de fuerza explosiva en las siguientes 24 horas.
Presenta valores inferiores en Frecuencia Cardiaca (FC), lactato en sangre y presión arterial.
Cada unidad motriz necesita producir una fuerza superior, y sus fibras musculares soportan mayor carga, por lo que puede suponer mejoras en Fuerza Máxima.
Komi y Burskirk (1972) muestran que 6 contracciones excéntricas efectuadas 4 veces por semana durante 7 semanas dan mejores resultados que el mismo programa que comporte un trabajo concéntrico.

Fuentes:
Efdeportes
Federacion Española de Medicina del Deporte:
Los Metodos Modernos de Musculacion» (Cometti, 2005)